Este aumento del gasto se desveló en el informe que presenta el primer ministro chino, Li Keqiang, durante la jornada inaugural de la sesión anual de la Asamblea Nacional Popular (ANP, Legislativo).
El documento también recoge previsiones como la rebaja del consumo energético por unidad del PIB de alrededor del 3 por ciento, una iniciativa encaminada a "mejorar el medioambiente" del país asiático.
En este mismo sentido, el gobierno se marcó también el objetivo de reducir a lo largo de este año en un 3 por ciento sus emisiones de dióxido de azufre y óxido de nitrógeno, dos de los principales gases contaminantes, con el objetivo de "consolidar y expandir" los avances de China en materia de medioambiente.
Todas estas medidas se encaminan a "mejorar en mayor medida el entorno ecológico", señala el documento, que añade que para hacer realidad estas metas habrá que "realizar duros esfuerzos".
Según el citado informe, estos objetivos son "activos y prudentes", ya que "representan nuestro objetivo de promover el desarrollo de alta calidad, se corresponden a la realidad actual del desarrollo de China y están vinculados con el objetivo de completar la construcción de una sociedad moderadamente próspera en todos los sentidos".