Según el comparador de seguros Rastreator.mx, en México, sólo el 1 por ciento de los conductores que compran vehículos automotores, adquieren un auto eléctrico o híbrido. La compra de estas unidades ayuda al medio ambiente y también tiene ventajas económicas para los bolsillos de los usuarios. Con un coche híbrido se puede gastar la mitad de gasolina al año que con uno convencional.
La compra de autos eléctricos e híbridos por parte de automovilistas mexicanos ha ido aumentando poco a poco desde que empezaron a venderse en México hace más de diez años. La entidad con mayor adquisición de estos modelos es la Ciudad de México, pues datos de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), indican que de los más de 9,000 carros comercializados de enero a julio de 2018 con estas tecnologías, la capital del país encabeza las cifras con más de 36 por ciento de compras, le sigue el Estado de México con cerca de 14 por ciento y Jalisco con 8.2 por ciento.
Sin embargo, la compra de autos híbridos y eléctricos sigue siendo menor en comparación con los autos convencionales, ya que según la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) de enero a diciembre del 2017 se comercializaron alrededor de un millón 500,000 unidades en México. En cambio, aquellos vehículos que no utilizan motor de gasolina o lo combinan con un eléctrico, registraron una adquisición de 10,500 vehículos en el mismo lapso, es decir, aproximadamente 1 por ciento de los conductores mexicanos se interesan por adquirir estos coches.
La importancia de la compra de unidades híbridas y eléctricas no sólo radica en la disminución de polución en ciudades como Monterrey, Toluca, Puebla y Ciudad de México, sitios considerados como los más contaminados en los últimos dos años según la Organización Mundial de la Salud (OMS), sino en las ventajas económicas que se perciben de manera paulatina.
Es cierto que su costo es un poco más elevado que los coches de gasolina, sin embargo, el incremento del precio del carburante se resiente en los bolsillos de los conductores mexicanos. Y es que un auto convencional se puede gastar hasta el doble en gasolina al año, respecto a un auto híbrido. Por ejemplo, en un Nissan Sentra 2017 se invertiría alrededor de 17,700 pesos al año en carburante, en contraste, con un Kia Niro Híbrido 2017, sólo 9 mil 800 pesos; misma cantidad que se desembolsaría con un Ford Fusion Hybrid 2015. Según arroja el portal online de Ecovehículos.
Además aquellas personas que manejan estas unidades, están exentas de pagar la tenencia y la verificación vehicular, pues obtienen la constancia tipo exento o doble cero con la cual podrán circular todo el año aunque se active la contingencia ambiental. Pudiendo ahorrar más de mil pesos al año. Y como estímulo fiscal, se ha propuesto eliminar el pago del Impuesto sobre Automóviles Nuevos (ISAN) y la Ley del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a aquellos ciudadanos que adquieran coches híbridos y eléctricos. Esto ayudaría a que la depreciación de estos vehículos sea menor que los convencionales.
Ángel Hidalgo, CEO de Rastreator México, comenta que: “las compañías aseguradoras reconocen la importancia de los autos híbridos y eléctricos por lo que comienzan a crear paquetes con coberturas exclusivas que respalden a sus usuarios. Una póliza completa como Amplia Plus cuenta con asistencias y respaldo ante cualquier siniestro vehicular, además protege en reparación o indemnización de piezas importantes de estas unidades tecnológicas como el motor eléctrico o la batería.”