En un documento entregado al presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, sostiene también que el plan propuesto de operación simultánea daría lugar a la creación de un sistema aeroportuario y aeroespacial congestionado, con retrasos y problemas operacionales que impedirían satisfacer la demanda de aviación a largo plazo en la Ciudad de México
El centro de investigación especializado en asesoría de aviación sostuvo que es raro encontrar espacio disponible cerca de una gran metrópoli para la construcción aeroportuaria, por lo que “Texcoco es una verdadera excepción”.
Por ello, insistió, operar técnicamente ambos aeropuertos es un proceso que no sería seguro. "Aeronáuticamente no es viable, no se puede, además crearía un espacio severamente congestionado”.
El director del Centro para el Desarrollo de Sistemas Avanzados para la Aviación de la Corporación Mitre, Bernardo Lisker, precisó en marzo pasado que la interferencia se daría al tener dos aviones volando uno del norte y el otro del este que deberán cruzar por el mismo punto, con una separación vertical menor a lo que las reglas establecen, y estaría abajo de mil pies, contra la seguridad.
En la actualidad, la separación entre aeronaves que aterrizan en el aeropuerto capitalino es de cuatro millas náuticas, y con Santa Lucía se tendría que llegar a las ocho millas náuticas.
Detalló que el descenso de un avión empieza varios kilómetros antes, por lo que al simular las operaciones de ambas terminales, las aeronaves llegarían a la zona de San Mateo a 12,500 pies, mientas las que van al AICM pasan en ese sitio a 12,000 pies, por lo que habría una interferencia, con distancia vertical de menos de mil pies.
El presidente del Colegio de Ingenieros Mexicanos en Aeronáutica (CIMA), Gregorio García Morales, coincidió en que la operación simultánea del AICM y Santa Lucía no sería factible, debido a que en la trayectoria de los aviones existe un punto en donde los vuelos convergen, lo que, en dado momento, pudiera provocar ciertos problemas en la operación o hasta algún accidente.
“Las trayectorias de vuelo llegan a un punto donde convergen y esto puede provocar serios problemas, uno o varios accidentes. Las trayectorias no están propias para que estén operando al mismo tiempo. Además, ahora las aeronaves traen otras tecnologías, por eso se requiere otro aeropuerto con otras tecnologías y una amplitud diferente”, explicó.
En entrevista con Notimex, afirmó que por ello el aeropuerto que se construye en la actualidad es necesario, así como por la saturación de la actual terminal.
En el documento entregado al presidente electo, que forma parte de los 270 que fueron exhibidos el pasado viernes, Mitre afirma que el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) ofrece significativamente más capacidad como un aeropuerto único, que las capacidades potenciales combinadas de un AICM ampliado y Santa Lucía.
Así como eficiencia en la separación de las operaciones nacionales e internacionales, en lugar de tener los dos aeropuertos, ya que se crea una operación altamente ineficiente, tanto aeronáutica como económicamente, argumentó.
Si el AICM no se cierra, la exposición significativa al ruido a las áreas residenciales continuaría sin respiro en el futuro, además de la adición de pistas en Santa Lucía causaría exposición al ruido en las comunidades cercanas, añadió el estudio.