Toshiba lanzó en 2008 el SCiB , una batería de iones de litio segura, de carga rápida y larga duración. Desde entonces, la compañía ha perfeccionado de manera regular la tecnología y ha mejorado el rendimiento del mundo real. Para su SCiB de última generación, Toshiba ha desarrollado un material de ánodo de óxido de niobio y titanio que tiene el doble de capacidad de almacenamiento de litio por volumen de los ánodos a base de grafito utilizados generalmente en baterías de iones de litio.
La nueva batería también ofrece alta densidad de energía y características de recarga ultra rápidas, y es menos probable que su ánodo de óxido de niobio y titanio experimente deposición de metal de litio durante la recarga ultra rápida o la recarga en condiciones frías (una de las causas de degradación de la batería y cortocircuitos internos).
El actual SCiB de Toshiba emplea un ánodo de óxido de titanio y litio y es conocido por sus excelentes características de funcionamiento en cuanto a seguridad, larga vida y carga rápida. Tiene una amplia utilidad en vehículos y aplicaciones industriales y de infraestructura, que incluyen automóviles, autobuses, vagones de ferrocarril, ascensores y centrales energéticas. La alta densidad energética de la batería, y su rápida recarga, han contribuido de manera muy importante en mejorar la comodidad y promover la propagación de los VE.
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Con base a esta herencia, Toshiba ha desarrollado un método patentado para sintetizar y disolver cristales de óxido de niobio y titanio y almacenar iones de litio de manera más eficaz en la estructura cristalina. El ánodo de la última generación de SCiB, logrado gracias a este enfoque, dobla la capacidad del ánodo de las actuales baterías de iones de litio.
“Estamos muy emocionados por el potencial del nuevo ánodo de óxido de niobio y titanio y el SCiB de última generación”, ha afirmado Osamu Hori, director del Centro de Investigación y Desarrollo Corporativo de Toshiba Corporation. “Más que una mejora gradual, esto es un avance que cambiará las reglas del juego y marcará una diferencia significativa en el rango y el rendimiento de los VE. Seguiremos mejorando el rendimiento de la batería y continuaremos con el objetivo de poner en práctica la última generación de SCiB en el ejercicio de 2019”.
Las rigurosas pruebas de un prototipo de 50Ah de la nueva batería han confirmado que conserva el ciclo vital largo, la actividad a bajas temperaturas, las excelentes características de recarga rápida y seguridad del actual SCiB. La densidad de energía por volumen de la batería es el doble que la de actual SCiB. El SCiB de última generación mantiene más del 90 por ciejnto de su capacidad inicial después de haber sido sometido a 5,000 ciclos de carga/descarga, y la recarga ultra rápida puede realizarse en condiciones frías, con temperaturas tan bajas como -10 ºC, en tan solo diez minutos.
Toshiba continuará desarrollando baterías de mayor densidad de energía que amplíen la gama de los VE y apoyen la recarga ultra rápida, y apunta a comercializar la próxima generación de SCiB en el ejercicio de 2019.
Parte de los trabajos de investigación sobre la última generación de SCiBTM lo subvencionó la Organización de Nueva Energía y Desarrollo Tecnológico Industrial (NEDO) de Japón.