“Debemos comprometernos con una actualización constante de nuestros productos y programas, ya que entre los principales cambios tecnológicos que se prevé tengan un alto impacto en el sector podemos destacar la electrificación de los vehículos, la conducción autónoma y la conectividad en los vehículos automotores”, expuso.
El funcionario dijo lo anterior durante el foro Desarrollo de las Cadenas de Valor en la Industria Automotriz, organizado por el Bancomext en Querétaro, con el propósito de promover sus instrumentos para financiar empresas de ese sector que participan directa e indirectamente en la cadena de comercio exterior.
De acuerdo con un comunicado del banco de desarrollo, la industria automotriz en México es parte del enfoque estratégico del gobierno federal, dada su importante participación en la producción, generación de ingresos, empleo e inversión.
En 2016, este sector representó 3.6 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional y el 18 por ciento del PIB manufacturero, y de 2012 a 2016, la producción nacional de vehículos presentó una tasa de crecimiento anual promedio de 4.7 por ciento, lo que le permitió a México incrementar su producción a 3.4 millones vehículos.
En la actualidad, México ocupa el séptimo lugar como productor de vehículos a nivel mundial, con un valor de exportaciones por encima de los 110,000 millones de dólares al cierre de 2016, y es la cuarta nación exportadora en el ramo, detrás de Alemania, Japón y Estados Unidos.