Sánchez ha hecho esta afirmaciones durante su intervención en el foro organizado en Ciudad Real junto al Ilustre Colegio de Gestores Administrativos de Madrid (Icogam), donde ha tenido lugar una jornada que ha reunido a numerosas representantes del sector para hablar sobre la transferencia telemática de vehículos.
Ganvam, que representa a 4,600 concesionarios/servicios oficiales y 3,000 compraventas, ha destacado que en Castilla-La Mancha podrían perder cerca de un centenar de puestos de trabajo este año debido a la fuerte bajada de las ventas en la comunidad que, tras caer más de un 50 por ciento desde que estallara la crisis, acumulan un descenso del 2 por ciento en lo que llevamos de año.
El responsable de Ganvam ha recordado que según las previsiones, el mercado nacional se situará en este ejercicio por debajo incluso de las 800,000 unidades vendidas, un 50 por ciento menos que antes de la crisis.
Paralelamente, ha comentado, "el sector de la distribución ha perdido desde 2007 más de 50,000 puestos de trabajo y unas 2,500 empresas -de las que el 80 por ciento han sido pymes- se han visto obligadas a echar el cierre".
Pese a ello, ha destacado los "esfuerzos" que realiza el sector para adaptarse a la caída del consumo, caso de las importantes promociones que están ofreciendo vendedores y fabricantes, llegando en algunos casos hasta los 4,000 o 5,000 euros de descuento.
Ha valorado, asimismo, la puesta en marcha de medidas como el reciente acuerdo entre Ganvam y el Icogam para agilizar los trámites administrativos relacionados con la compra de vehículos que, ha comentado, "permitirá a los compradores disfrutar de sus vehículos de forma prácticamente inmediata, con el correspondiente ahorro de tiempo y dinero".
En este negativo clima económico, ha señalado, los coches de ocasión se están convirtiendo en una alternativa a la venta de nuevos, con un crecimiento del 11 por ciento en los dos primeros meses del año, hasta superar las 265,000 unidades.
Precisamente, ha señalado, en Castilla-La Mancha se registró uno de los mayores incrementos de este tipo de operaciones, con un alza del 10.7 por ciento respecto al mismo periodo del ejercicio anterior (13,701 unidades).
Pese a todo, estas cifras "aparentemente positivas, esconden también una triste realidad para las redes de distribución", pues la crisis ha aumentado las operaciones entre particulares -generalmente vehículos de más de diez años, muy rodados y sin garantías- hasta el punto de concentrar el 55.6 por ciento de las ventas de usados hasta febrero.
Sánchez también se ha referido al vehículo eléctrico cuyas ventas se situaron en 375 unidades en el conjunto de España, de las cuales tan solo 7 se localizaron en la comunidad castellanomanchega.
Para la asociación de vendedores, hoy por hoy "no existe una demanda real para el vehículo eléctrico" sino que representa una alternativa de futuro que para convertirse en una solución de movilidad real necesita dar respuesta a problemas tan importantes como la autonomía, el precio o las infraestructuras de recarga.