Durante su intervención en el Encuentro Santander-América Latina en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, Luzón ha dicho que en un mundo más global e integrado, en el que los grandes países emergentes van a ser protagonistas del crecimiento mundial, Latinoamérica tiene un enorme potencial que "va a poner en valor" en el periodo 2010-2020 y está mejor posicionada que los países asiáticos.
El presidente de la División América ha destacado los avances políticos, económicos y sociales que ha vivido este continente, que representa el 8 por ciento de la población mundial y el 9 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) y tiene una renta per cápita que dobla la media de los países emergentes.
Luzón ha dicho que el centro de gravedad del mundo se esta trasladando desde el norte, "rico pero envejecido", al sur y al Pacífico, más pobre pero mucho más joven, y ha afirmado que la mayoría de los países de Latinoamérica tienen un perfil demográfico que supone un "auténtico bono para el crecimiento".
Y ha explicado que la media de edad del continente -27.7 años- está incluso por debajo de la de la Asia emergente -29 años- y de China -34.2 años-, lo que generará durante algún tiempo un diferencial de crecimiento en favor de América Latina.
Uno de cada doce habitantes del mundo seguirá siendo latinoamericano durante la próxima década, lo que, según Luzón, también es una garantía de que el continente "no quedará fuera del radar político, económico o empresarial del mundo".
Bajo su punto de vista, la demografía ha estado y seguirá estando en la base de los grandes cambios políticos, económicos y sociales.
Luzon ha defendido también que pese a la volatilidad de su macroeconomía de las últimas décadas, el continente ha sabido jugar bien sus bazas y sigue aportando el 9 por ciento del PIB mundial y no es un mercado marginal, sino una fuente relevante de ese crecimiento mundial que se desplaza hacia el sur.
Y ha citado como otra de las ventajas competitivas de Latinoamérica frente a otros países emergentes su renta per cápita, que en 2020 podría pasar de 11 mil 300 a 16 mil dólares estadounidenses de media y alcanzar los 20 mil en sus siete países 'core': Argentina, Brasil, Chile, Colombia, México, Perú y Uruguay.
Durante su intervención, el consejero ha citado como bases del éxito de Latinoamérica su estabilidad económica y la reducción de la volatilidad, pero también la mejora del acceso a la educación y el fuerte aumento de las transferencias del Estado a los más pobres.
Luzón ha concluido que Latinoamérica tiene un "esperanzador punto de partida para hacer frente a los retos de la próxima década y ha opinado que el desarrollo de los países asiáticos le crea unas "condiciones óptimas" para poner en valor sus ventajas competitivas y mejorar también algunas de sus "seculares vulnerabilidades" -una reducida generación de ahorro y un bajo nivel de inversión-.
El directivo del Santander ha dicho que Latinoamérica es "un continente con ventajas para ser un ganador" para el Siglo XXI.
Y ha explicado que América Latina es el continente de las materias primas, con capacidad para decidir el precio de los "commodities", y un territorio sin conflictos abiertos o pendientes y relativamente homogéneo desde el punto de vista cultural, histórico, racial y lingüístico.
Luzón ha destacado el comportamiento "responsable" que Latinoamérica ha mantenido frente a la crisis y ha citado como bases de su despegue las clases medias, que, a su juicio, son "motor de cambio"; el hecho de que se haya convertido en un continente urbano, joven, con ciudadano sanos y mejor educados, y una situación macroeconómica favorable.
Ha destacado que el déficit público de la región no ha crecido desde 2008 más que 2.2 puntos sobre el PIB, un comportamiento que ha calificado de responsable y que unido a la recuperación del crecimiento y al saneamiento de las finanzas públicas le da una ventaja competitiva inédita: su nivel de deuda.