El potencial impacto a la baja será de 0.3 a 0.4 puntos porcentuales en el PIB anual, pronosticó el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), que agrupa a directivos financieros de las empresas más importantes de este país.
"Estos eventos recientes, de carácter transitorio, restan dinamismo a la actividad económica en México", dijo el presidente del IMEF, Fernando López Macari en conferencia de prensa.
El Instituto redujo su expectativa de crecimiento económico para el país en 2019 del 1.7 al 1.5 por ciento, la cual tenía un estimación, en diciembre de 2018, de 1.8 por ciento.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador estima un crecimiento del PIB en un rango de entre 1.5 y 2.5 por ciento para el 2019.
El vicepresidente del comité de estudios económicos del IMEF, Mario Correa, estimó que la economía mexicana perdió 3,000 millones de dólares en el PIB para el cierre de 2019.
El crecimiento económico podría seguir a la baja, debido a la incertidumbre de los inversionistas tanto por factores externos como internos, y en especial por los cambios que se están dando en el gobierno mexicano, apuntó.
"Ante este entorno de incertidumbre los inversionista son más cautelosos, al igual que el consumidor, piensen dos veces antes de invertir", expuso Correa.
En los primeros dos meses de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, hubo un operativo contra el robo de combustible, la huelga de 45,000 obreros de empresas maquiladores y bloqueos de vías de ferrocarril por parte de maestros disidentes.
López Obrador comenzó un combate frontal contra el robo de hidrocarburos de los oleoductos de la empresa estatal Petróleos Mexicanos y eso provocó una baja en el abasto en 14 estados.
En Matamoros, frontera con Estados Unidos, el 25 de enero comenzó la huelga de unos 45,000 trabajadores de maquiladoras y dos semanas después se resolvió en 44 empresas con una aumento salarial del 20 por ciento y el pago de un bono anual de 32,000 pesos (unos 1,671 dólares).
Los maestros disidentes que bloqueaban vías férreas en el occidental estado de Michoacán levantaron su protesta a principios de febrero tras obtener el pago de salarios atrasados, bonos especiales y de instalar una mesa de diálogo para discutir otras demandas.