En su informe anual publicado hoy viernes, la OIT señala que el crecimiento del sueldo en los países industrializados fue casi cero en los dos años anteriores.
Los salarios reales en esos países aumentaron un 0,1 por ciento en 2012 y un 0.2 por ciento en 2013, por debajo de los respectivos promedios mundiales del 2.2 y 2.0 por ciento para esos años.
Esto "conduce a un lento desarrollo de la demanda en la mayoría de esas economías y un creciente riesgo de deflación en la eurozona", dijo la vicedirectora general de la OIT, Sandra Polaski.
Los salarios aumentaron a un ritmo menor que la productividad laboral en este grupo de países en los pasados 14 años, dice el informe.
De nuevo, los países que registraron el mayor incremento de los salarios el año pasado fueron los emergentes y en desarrollo, en especial en Latinoamérica y Asia.