En un comunicado, BP precisó que, además de un pago inicial de 1,058 millones de dólares, se espera otro adicional que, dependiendo de la producción y del precio del crudo, se situaría en torno a unos 250 millones de dólares.
Los activos incluidos en esta venta, que forma parte del proceso de desinversión iniciado por BP, son, entre otros, su participación en los pozos Maclure, Harding y Devenick así como en los complejos Brae y Braemar.
La transacción está sujeta a la aprobación de los reguladores y se espera que concluya en el segundo trimestre de 2013, señala la compañía.
BP ha iniciado un proceso de desinversión en todo el mundo a fin de reunir fondos para sufragar los gastos derivados del vertido de crudo desde una de sus plataformas en el Golfo de México en 2010, que provocó la muerte de 11 trabajadores y un grave desastre medioambiental.
Teniendo en cuenta la venta anunciada hoy, la empresa se ha desprendido ya de activos por valor de unos 37,000 millones de dólares, de 38,000 millones que se ha propuesto alcanzar para finales de 2013.
Pese a reducir su presencia en el mar del Norte, el gigante británico ha asegurado que continúa comprometido con la zona, con planes para invertir unos 10,000 millones de dólares en cinco años.