Las deudas totales que Gazprom le reclama a Kiev ascienden por ello a unos 5,300 millones de dólares (unos 3,900 millones de euros), dijo el presidente de Gazprom, Alexei Miller. "Otra vez Ucrania no ha pagado. Eso demuestra que fue correcto cortarles el gas", señaló.
Rusia cerró el grifo de los suministros al país vecino el pasado 16 de junio y quiere volver a negociar sólo cuando Ucrania salde su deuda. La cúpula de Kiev exige a Moscú un precio del gas más bajo y descuentos.
Los expertos consideran que no habrá acuerdo hasta que no se solucionen otros temas de disputa entre los dos países, como el conflicto con los separatistas fieles a Moscú en el este de la ex república soviética.