Siete miembros --Rusia, la India, Venezuela, Turquía, Noruega, Suiza y Singapur-- se unieron a China, que planteó el asunto, para expresar sus respectivas preocupaciones por la decisión de Estados Unidos conforme a la Sección 232.
China advirtió que la Sección 232 daña severamente la estabilidad del sistema comercial multilateral y distorsiona las cadenas de suministro internacionales, con considerables efectos negativos.
China indicó que la decisión de Estados Unidos de exentar de los aranceles a ciertos exportadores, incluyendo a algunos de los mayores proveedores del mercado estadounidense, claramente viola el principio de nación más favorecida de la OMC.
Rusia señaló que todo el proceso de discusión e implementación de los aranceles careció de transparencia y privó a los productores extranjeros del derecho de presentar evidencia en comparecencias.
Las acciones estadounidenses sólo causarán inestabilidad, conducirán a crecientes barreras comerciales y crearán una situación en la que todos los miembros perderán, dijeron delegados rusos.
Por su parte, Washington insistió en que los aranceles fueron impuestos por razones de seguridad nacional y que no son una acción de salvaguardia, por lo tanto, no existen motivos para que los miembros soliciten consultas con Estados Unidos sobre la cuestión bajo el Acuerdo de Salvaguardias.
Pese al amplio desacuerdo de los grupos de negocios y de socios de comercio del mundo entero, el presidente estadounidense, Donald Trump, promulgó el 8 de marzo la imposición de un arancel de 25 por ciento al acero importado y uno de 10 por ciento al aluminio.
Fuente: Xinhua.