Parte fundamental en la comunicación entre ciudadanos, los transportistas han sido excluidos de la planeación de las ciudades, por lo que ahora es urgente que se involucren de manera más activa en este tema, pues sólo de esta manera será factible instrumentar proyectos realistas de desarrollo urbano orientados a la movilidad, refirió el empresario durante su participación en el Centro Internacional de Negocios (Corferias).
Con la presencia de 70 expositores de 15 países (50 nacionales y 20 extranjeros), de especialistas y distribuidores de medios de transportación, de la industria automotriz y de ensambladoras, así como de investigadores y representantes gubernamentales de diferentes naciones, la Feria Internacional de Transportes de Colombia (Fitrans) es hoy por hoy el foro mundial más relevante para exponer las preocupaciones urbanas, ambientales, financieras y de tecnología de vanguardia en materia de transporte de pasajeros, tanto de América como de Europa y Asia.
Al compartir su experiencia en el VII Congreso Internacional de Transporte, organizado por Corferias y Transmilenio, en alianza con la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad (AMTM), cuyo eje central es Transporte Masivo: motor de desarrollo, Jesús Padilla sentenció que las empresas de transporte deben involucrarse de manera más activa en la urbanización, por lo cual advirtió que “sólo de esta manera será factible instrumentar proyectos realistas de desarrollo urbano orientado al transporte”.
Aunque, admitió que las autoridades desestiman “el olfato del transportista” en la solución de problemas, los programas se realizan sin escuchar propuestas y no se toma en cuenta sus necesidades o los costos que conlleva la aplicación en esta materia.
En este sentido, el empresario mexicano propuso como opción la creación de un Sistema Integrado de Transporte (SIT), ya que “es uno de los tantos elementos que inciden en las acciones del sector hacia un desarrollo orientado al transporte, pero no debe ser un elemento gestor”.
Padilla Zenteno manifestó su preocupación en materia urbana, financiera, ambiental y social, por lo cual dijo que los efectos adversos en el transporte, pues “se hizo de forma distante, con grandes distancias por recorrer y viajes origen-destino de poca rotación; disperso, con trayectos vacíos y un bajo índice de pasajeros por kilómetro, así como desconectado por la difícil accesibilidad, poca intercomunicación y carente de continuidad vial”.
Asimismo, advirtió del divorcio entre transporte, desarrollo urbano y medio ambiente, el cual se planea, pero no se instrumenta, debido a ello existe una gran especulación del suelo urbano con más de 85,000 hectáreas de baldíos en ciudades de más de 50,000 habitantes.
En este sentido, ejemplificó el caso de Monterrey, donde en tres décadas, de 1980 a 2010, la población creció dos veces, pero la ciudad se ha expandido cinco. En consecuencia, la longitud de los viajes promedio se incrementó 2.8 veces.
Ante un nutrido auditorio, el también vicepresidente de delegaciones de la Coparmex ciudad de México habló del divorcio entre transporte, desarrollo urbano y medio ambiente. Se planea, pero no se instrumenta, lo que ha permitido una gran especulación del suelo urbano con más de 85 mil hectáreas de baldíos en ciudades con más de 50,000 habitantes.
Entre las propuestas compartidas, el representante de la AMTM urgió trabajar con las autoridades para identificar las prioridades de inversión en el transporte y tener acceso a los apoyos federales
Dijo que los transportistas deben involucrarse en la toma de decisiones relacionadas con el desarrollo económico de la región, el uso de suelo y las prioridades de inversión en esta materia, mientras que en el aspecto municipal, hay que participar en el proceso del desarrollo del uso de suelo, así como mostrar una visión de largo plazo y planeación estratégica.
En su planteamiento, Padilla Zenteno puntualizó que a nivel predio, hay que involucrarse desde un inicio con los desarrolladores inmobiliarios para orientar las necesidades de ambos actores.
“Las empresas de transporte deberían involucrarse en la planeación a nivel estatal, regional y municipal, donde tienen un mayor potencial de influir en el desarrollo urbano, tanto a corto como mediano y largo plazo”, acotó.
Señaló que el involucramiento va desde la definición conjunta de las áreas donde el transporte puede y debe penetrar, la modalidad con la que se debe prestar el servicio, las densidades para que el servicio sea costeable, la variedad de usos de suelo que permita el fomento de una mayor rotación de usuarios y con ello el incremento del IPK, el acceso a las paradas
En su ponencia, la cual despertó el interés de los asistentes al VII Congreso Internacional de Transporte, donde México participó como País Invitado, Jesús Padilla habló de los efectos financieros, y comentó que éstos se desarrollan en la frontera entre la ciudad y el área rural, al crecer sin atención o recursos, mientras los efectos sociales se miden con los tiempos de traslado que van en aumento, porque 31 por ciento de los propietarios aseguran que no viven en su hogar y se desplazaron al centro de la ciudad debido a la distancia entre vivienda y trabajo.
Por último, al referirse a las 5 Ds de la urbanización que influyen en la demanda como factor clave para el transporte, enumeró: Destino accesible, que tan fácil es acceder a los destinos de los viajes; Diversidad en el uso del suelo, la mezcla de habitación, comercio, trabajo y el balance espacial del mismo (casa-trabajo); Densidad, qué tanta gente capto dentro del área de cobertura; Diseño urbano, como acerco el transporte al usuario, ya sea a pie o en bici (la red vial), y Distancia del origen a la parada, la cercanía de las paradas para el usuario.
Entre los participantes en este encuentro que concluye el sábado 21 de noviembre, destaca la experta estadounidense Robin Chase, quien hablará sobre el surgimiento de nuevos paradigmas en la organización de la movilidad, al desempeño de las empresas del sector y a novedosas fórmulas de racionalización económica.
Mientas que el presidente ejecutivo de Corferias, Andrés López, apuntó: “consideramos que la movilidad urbana tiene mucho que ver con la sostenibilidad y mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de las medianas y grandes ciudades y la consolidación del transporte de carga es un elemento fundamental de la competitividad empresarial de nuestro país.”
Por su parte, el embajador de México en Colombia, Arnulfo Valdivia, recordó que hace 60 años sólo 40 por ciento de la población vivía en zonas urbanas. Por lo que ahora, 60 años después, 80 por ciento vive en ciudades. “La realidad colombiana no es muy diferente”, dijo.
El alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, reconoció que soluciones a la movilidad “no las vamos a ver dado la actual tecnología humana, sino en grandes ciudades como Londres, México y París. Por ello, debido a su nivel parecido de densidad poblacional, tiene que verlo desde esa perspectiva de las grandes ciudades del mundo".