La compañía precisó en un comunicado que la medida traerá más de 850 nuevos puestos de trabajo a Arlington, incluyendo los 600 procedentes de México.
General Motors no mencionó cuáles serán las plantas en México que perderán los puestos de trabajo debido a la reubicación.
"Este nuevo parque de proveedores creará una eficiencia logística y coordinación mejoradas, al tiempo que traerá importantes oportunidades de empleo a Arlington", señaló en el comunicado Steve Kiefer, vicepresidente de compras globales y cadena de suministro de General Motors.
La automotriz emplea actualmente a unas cuatro mil 225 personas en su planta de ensamblaje en Arlington, donde fabrica vehículos de los modelos Chevrolet Tahoe y Suburban, GMC Yukon y Yukon XL, así como Cadillac Escalade.
General Motors ha estado ejecutando una estrategia para crear parques de proveedores adyacentes a sus sitios de fabricación en Estados Unidos y la compañía indicó que seguirá ampliando este esfuerzo.
La reubicación de plazas de México a Estados Unidos se da mientras el gobierno de Donald Trump considera renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y legisladores republicanos analizan imponer un arancel a las importaciones, lo que encarecería a las automotrices poder importar partes desde el vecino país.