Los autobuses fueron recibidos por el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y entregados por el embajador de Rusia en Managua, Igor Kondrashev, en un acto simbólico celebrado al aire libre en la Plaza de la Fe Juan Pablo II, cerca del lago Xolotlán.
El embajador remarcó que Moscú "ha cooperado, coopera y cooperará" con Nicaragua "sin ninguna politiquería y sin ninguna injerencia".
"Si alguien quiere ayudar, que ayude, pero sin condicionar esta ayuda", enfatizó el diplomático.
Ortega ha criticado a Estados Unidos y a la Unión Europa (UE) por supuestamente "condicionar" su cooperación con Nicaragua.
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Kondrashev explicó que con esos 250 autobuses, con las cuales ya suman 380 los donados por Rusia a Nicaragua, esperan contribuir a mejorar el transporte público en la capital nicaragüense.
El mandatario nicaragüense precisó, por su parte, que los autobuses tienen capacidad para 74 pasajeros, sin embargo dijo que tendrán que ser remodelados para "darle más condiciones a los usuarios", que cifró en un millón en Managua.
Ortega resaltó que además de los autobuses, Rusia ha donado a Nicaragua 500 vehículos marca Lada para taxi.
El gobernante y candidato a la reelección en los comicios del próximo 6 de noviembre anunció que Moscú enviará el próximo año otras 300 unidades del transporte colectivo y otros 500 vehículos para taxi.
Asimismo, tanto Ortega como Kondrashev informaron que Rusia valora la posibilidad de instalar una planta ensambladora de autobuses en Nicaragua.
En el acto, el mandatario sandinista informó además que este martes fue suscrito en Moscú un convenio mediante el cual Rusia donará a Nicaragua 100,000 toneladas de trigo, por un valor de 35.2 millones de dólares.
Además de Ortega y Kondrashev, en el acto oficial participaron un ejecutivo del grupo GAZ, el mayor fabricante automotriz de Rusia; la primera dama y coordinadora del Consejo y Comunicación del Gobierno, Rosario Murillo; el cardenal Miguel Obando y Bravo; y autoridades municipales y del transporte colectivo.