La caída se debió en primer lugar al impacto negativo puntual (de 75 millones de euros) por la compra de Grid), pero también al deterioro del resultado operativo por el mal comportamiento de la actividad de equipos de producción eléctrica y por las importantes cargas financieras y de reestructuración, precisó Alstom en un comunicado.
El resultado operativo bajó un 8 por ciento hasta los 763 millones de euros y el margen operativo quedó en el 7.3 por ciento de la facturación, cuando entre abril y septiembre de 2009 había sido del 8.3 por ciento.
La facturación, por su parte, en términos absolutos subió un 8 por ciento hasta 10,432 millones de euros, pero descontando el efecto de la integración de Grid disminuyó un 8 por ciento con 8,905 millones.
Los encargos recibidos durante ese primer semestre del ejercicio contable con 7,038 millones de euros experimentaron una baja del 1 por ciento, aunque sacando de nuevo el impacto de Grid la regresión fue del 21 por ciento.
El presidente de Alstom, Patrick Kron, justificó la reestructuración en la división de equipamientos para centrales térmicas en Europa y en Estados Unidos por el bajo nivel de la demanda.
"El resto de nuestra cartera de actividades está mejor orientada, y en particular en los países emergentes donde se presentan numerosas oportunidades", destacó Kron, que insistió en que el resultado operativo estuvo en línea con las previsiones de la dirección.
En cuanto a las perspectivas, el responsable ejecutivo de la compañía confirmó que tanto en este ejercicio contable como en el próximo el margen operativo debería situarse en una horquilla de entre el 7 y el 8 por ciento de la facturación.