Las protestas bloquean desde primera hora de la mañana los depósitos de trenes de varias ciudades del sur del país y han provocado fuertes perturbaciones en el tráfico ferroviario, según los medios locales.
La compañía nacional de trenes (SNCB) ha informado de que el 85 por ciento de sus instalaciones en la región sur de Valonia se han visto afectadas de una u otra forma por la huelga y teme que las protestas se extiendan.
Los conductores denuncian la degradación de sus condiciones de trabajo que, creen, pueden dar lugar a accidentes como el ocurrido ayer en Buizingen (suroeste de Bruselas), según la agencia Belga.
Los principales sindicatos aseguran no haber sido informados de la acción, pero han expresado su comprensión ante las protestas en reacción al suceso.
Mientras, el administrador delegado de la sociedad que gestiona la red ferroviaria belga, Luc Lallemand, que aseguró anoche que la catástrofe "se podría haber evitado" si los dos trenes que colisionaron hubiesen contado con el sistema de frenado automático, ha precisado hoy sus palabras.
Según Lallemand, con el mecanismo de frenado el nivel de seguridad "habría mejorado", pero no necesariamente se habría evitado el choque.
Ese sistema de frenos, con el que contaba sólo uno de los convoyes, está previsto que esté instalado en todos los trenes del país en 2013 para evitar que puedan superar semáforos en rojo.
Aunque no se han confirmado las causas del accidente, las autoridades señalaron ayer que el siniestro podría haberse producido al haber ignorado uno de los trenes un semáforo.
Hoy, la prensa belga dedica multitud de páginas al accidente y algunos diarios se han lanzado a denunciar la situación de seguridad de los ferrocarriles.
Entre ellos, los francófonos La Dernière Heure y La Libre Belgique, que consideran "inaceptable" que no todos los trenes cuenten con sistemas de frenado automático, especialmente cuando en los últimos años se han invertido grandes sumas de dinero en estaciones "faraónicas" como las de Lieja y Amberes.
"¿Podemos permitirnos multiplicar las inauguraciones de llamativas estaciones cuando nuestro material rodante está obsoleto?", se pregunta uno de los periódicos.
Mientras, otros diarios como Le Soir piden esperar al fin de la investigación para sacar conclusiones, pero recuerdan que los conductores han denunciado regularmente el riesgo de accidente ante la falta de sistemas de frenado automático en muchos de los trenes.