Esta cifra, que la compañía afirmó que podría ser incluso superior, representa entre un 3.6 y un 4.5 por ciento del total del valor de bienes asegurados afectados por el huracán, que se sitúa entre los 20,000 y 25,000 millones de dólares.
El huracán Sandy causó fuertes vientos y tormentas que provocaron grandes inundaciones y pérdidas humanas y materiales.
El viceconsejero delegado de Swiss Re, Matthias Weber, destacó la importancia de los daños en el noreste de Estados Unidos, una región muy poblada, con cortes de electricidad prolongados, un mal funcionamiento del transporte público y daños en infraestructuras "que han dificultado los esfuerzos de recuperación".
"Esto también complica el proceso de evaluación de pérdidas. Nuestra estimación de reclamaciones de pago está sujeta por lo tanto a un grado mayor de incertidumbre del habitual y podría tener que ser ajustada", agregó Weber.