El banco central de la mayor economía europea obtuvo un superávit de 2,950 millones de euros (3,131 millones de dólares) en 2014, que transfirió hoy al Ministerio de Finanzas alemán. La cifra quedó muy por detrás de los 4,590 millones de euros ganados en 2013.
La decisión del Banco Central Europeo (BCE) de reducir al mínimo histórico del 0.05 por ciento las tasas en la zona euro redujo de 5,600 a 3,100 millones los ingresos netos del Bundesbank por cobro de tasas, su principal fuente de ingreso.
"El beneficio es inferior que el del año pasado sobre todo por la reducción de ingresos por intereses", constató el presidente del Bundesbank, Jens Weidmann.
El directivo pronosticó además una nueva caída de beneficios en 2015 tanto por el efecto de las tasas bajas como por el aumento de garantías que exigirá el nuevo programa de compra de deuda pública lanzado por el BCE para estimular la coyuntura en la eurozona.
Weidmann volvió a criticar el histórico programa del guardián del euro al considerar que "podría reducir la motivación de los países miembros para seguir consolidando presupuestos y tomando medidas de reforma".