La compañía, con plantas en Brasil y Estados Unidos, había registrado en los tres primeros meses del año pasado un beneficio de 305 millones de reales (unos 155.6 millones de dólares al cambio actual).
Las ganancias del primer trimestre, sin embargo, compensaron en parte las pérdidas por 201 millones de reales (unos 102.5 millones de dólares) que la empresa sufrió en los tres últimos meses de 2011.
En un comunicado a sus accionistas, Braskem atribuyó la reducción de los beneficios al pago de una indemnización por 236 millones de reales (unos 120.4 millones de dólares) por problemas con un contrato de entrega de materia prima en Estados Unidos.
La petroquímica informó de que sus ingresos líquidos en el primer trimestre sumaron 8,232 millones de reales (unos 4,200 millones de dólares), con un crecimiento del 11 por ciento frente al mismo período del año pasado, gracias al aumento de las ventas y por los mejores precios de los petroquímicos básicos actualmente.
El beneficio trimestral antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (ebitda) sumó 787 millones de reales (unos 401.5 millones de dólares), con una reducción del 14 por ciento frente al mismo período del año pasado.
"La industria petroquímica operó en el primer trimestre con márgenes aún deprimidas por la restricción de la demanda debido a la baja actividad económica, especialmente en los países desarrollados, sumada a la elevación de los precios de las materias primas, principalmente de la nafta", según Braskem.
Las ventas trimestrales de Braskem en volumen llegaron a 846,000 toneladas de resinas, con una elevación del 9 por ciento.
La deuda líquida de la petroquímica a finales de marzo llegaba a 6,100 millones de dólares, un cuatro por ciento inferior al registrado a finales de 2011, según el balance de la compañía.
La empresa destacó que en el trimestre avanzó en la construcción de una planta de PVC en el estado de Alagoas (noreste) que agregará 200,000 toneladas a su capacidad, y en las obras civiles para la fábrica de etileno que construye en México.
Las inversiones en el primer trimestre sumaron 700 millones de reales (unos 357 millones de dólares), un 50 por ciento de las cuales fueron dirigidas al aumento de la capacidad productiva.