El francés persigue su octava corona en nueve temporadas y salió de las montañas de Bergamasque con una ventaja de 6,5 segundos sobre su compañero de equipo Toyota Yaris World Rally Car.
La pareja compartió el botín a través de las nebulosas y resbaladizas pruebas de Gerosa y Costa Valle Imagna antes de que Ogier, que tiene una ventaja de 17 puntos antes de esta ronda final, ganara ambas carreras repetidas.
No todo fue sencillo para Ogier, cuyo coche se lanzó sobre dos ruedas en la etapa final después de cortar un bordillo en el interior de una horquilla cerrada.
“No fue realmente un 'momento', sino algo que no esperas en el asfalto”, dijo. “Fue hace mucho tiempo cuando comenzamos un rally con una buena puesta a punto y ahora se siente bien ver que finalmente llegan los tiempos”.
Evans logró tres segundos tiempos más rápidos para sumar a su victoria de etapa, pero el galés necesita más si quiere detener a Ogier. "No está mal, pero no exactamente donde queríamos estar", admitió. "Es un equilibrio entre el riesgo y conducir bien, y eso es en lo que estamos trabajando".
Los protagonistas del título se habían distanciado del resto del campo cuando el rally regresaba a Monza para el servicio. Un frustrado Thierry Neuville encabezó lo mejor del resto, 27,2 segundos por detrás de Ogier en su Hyundai i20.
El belga era uno de los dos únicos pilotos de alto nivel que llevaba dos ruedas de repuesto y creía que el peso extra afectaba el manejo de su coche en las zonas resbaladizas. “No puedo hacer nada más, estaba realmente al límite”, se lamentó.
El segundo paso por Costa Valle Imagna se detuvo luego de un puñado de autos debido a una emergencia médica. Los conductores que se ralentizaron o no intentaron la prueba recibieron tiempos teóricos.
Dani Sordo estaba 7.3 segundos detrás de Neuville en otro i20 y se quejaba de subviraje, pero tenía 17.0 segundos más que Oliver Solberg. El joven sueco escapó por poco en el segundo pase de Gerosa, pero se estaba adaptando bien con el nuevo copiloto Elliott Edmondson.
Evans mantuvo la presión sobre su compañero de equipo Ogier al frente del campo
Takamoto Katsuta y el debutante del i20 Teemu Suninen fueron sexto y séptimo, con Gus Greensmith pisándoles los talones en el Fiesta de M-Sport Ford. El trío ganó un lugar cuando su compañero de equipo Adrien Fourmaux se retiró después de derrapar en una esquina izquierda y golpear una pared.
Un cauteloso Kalle Rovanperä fue noveno, el hombre de Toyota Gazoo Racing con un ojo cauteloso en la oferta por el título de constructores de su equipo en caso de problemas para Ogier y Evans por delante.
Nikolay Gryazin completó la clasificación.