Tras el primer Berlín e-Prix, disputado el sábado, De Vries llegó a la carrera de cierre como líder de la general por un estrecho margen, pero pudo mantener la posición de privilegio en una carrera ganada por el francés Norman Nato (ROKiT Venturi Racing) para convertirse en el primer campeón del mundo del certamen para pilotos de monoplazas con propulsión eléctrica.
El neerlandés es el primer campeón del mundo de Fórmula E porque este certamen, que cumplió su séptima edición, estrenó este año su condición de Mundial avalado por la FIA.
Sus numerosos rivales por el título fallaron en la carrera decisiva. El suizo Edoardo Mortara, el británico Jake Dennis, el neozelandés Mitch Evans y el portugués Antonio Félix da Costa -que defendía el título- no pudieron acabar, mientras que el neerlandés Robin Frijns fue duodécimo, el también británico Sam Bird acabó séptimo y el brasileño Lucas di Grassi fue vigésimo.
Nato, que firmó su primer triunfo en el campeonato, ganó el segundo e-Prix de Belín, por delante del británico Oliver Rowland (Nissan e.dams) y del belga Stoffel Vandoorne (Mercedes-EQ Formula E Team), que salió desde la 'pole'.
Tras la quince carreras del año, Nyck de Vries acaba el primer Mundial de Fórmula E, en el que sumó dos victorias parciales, como ganador con 99 puntos, siete más que Edoardo Mortara y ocho de margen sobre Jake Dennis.