La mayoría de los aceites son derivados del petróleo, por lo que no deberían ser desechados en el medio ambiente ya que no se degradan, un ejemplo de ello es que un litro de aceite puede ocasionar la contaminación de un millón de litros de agua; así es preciso conocer cuáles son algunas de las consideraciones que debe tener una empresa para desechar de forma responsable este residuo.
Pochteca Macro Distribuidor de Lubricantes Shell proporciona a continuación algunos consejos para el manejo de los aceites después de su uso:
1. Capacitar al personal para el manejo de lubricantes: el primer paso para tener una disposición adecuada de los aceites usados y nuevos es capacitar a los colaboradores en temas de cuidado de las sustancias y medidas de protección, con el objetivo de que realicen el mantenimiento de la maquinaria de forma segura y adecuada.
2. Contratar a una empresa recolectora de estos desechos: la empresa debe recurrir a los servicios de una compañía especializada en el empleo de estas sustancias, por lo que es necesario que cuente con una autorización de labores.
3. Almacenar en contenedores especiales: una vez que los lubricantes han cumplido con sus funciones es fundamental que los encargados del mantenimiento de la maquinaria separen el aceite utilizado para que no sea confundido con el lubricante nuevo. Por ello, se requiere el uso de contenedores con indicaciones específicas.
Además de los aceites y grasas, se deben desechar también los elementos que tuvieron contacto con ellos como pueden ser trapos, estopas, aserrín o arena, ya que se encuentran impregnados de esas sustancias que pueden ser mezclados con otros líquidos.
4. Solicitar la recolección de lubricantes de manera periódica: pactar con la empresa contratada el tiempo en que se requiere el manejo de residuos, ya que ésta debe entregar un manifiesto de los aceites usados comprometiéndose a desecharlos correctamente.
5. Tener un plan de emergencia en caso de derrame: la empresa que utiliza lubricantes y grasas industriales requiere estructurar un plan en caso de que se presente un derrame de los aceites usados en sus instalaciones, con el objetivo de prevenir accidentes y contener la situación donde se pueden ocupar dispositivos anti derrames, espumas absorbentes, etc.
“Los lubricantes representan una ventaja en el día a día de las organizaciones industriales, ya que generan ahorro, reducen los costos de operación al incrementar la vida de los equipos y ayudan a consumir menos combustible; por lo que es esencial que las empresas también se ocupen de ser socialmente responsables al desechar estas sustancias de una forma adecuada para contribuir al cuidado del medio ambiente. Si bien es un proceso que requiere cierta especialización, el personal de mantenimiento de una empresa puede ayudar a manejar el aceite adecuadamente y desde ahí comienza el compromiso con su entorno”, comentó Alfredo López, Gerente Técnico en Pochteca Macro Distribuidor de Lubricantes Shell.
Actualmente, Pochteca trabaja en conjunto con Shell para llevar a cabo las mejores prácticas y evitar contaminaciones a causa de los aceites, brindan capacitación al personal de las compañías sobre el manejo de los lubricantes, así como las medidas para contener cualquier derrame. Adicionalmente, tiene relación con las entidades dedicadas a la recolección de los aceites usados para generar sinergia entre sus clientes y los especialistas.