Con base en las cifras de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), el crecimiento de este delito en la última década es del 71 por ciento en todo el país y del 95 por ciento solamente en los recientes seis años.
AMIS reporta que en el último año se robaron 83,477 vehículos asegurados en el territorio nacional (agosto 2010 a julio 2011), siendo el mes de abril del año pasado el más significativo con el 33 por ciento del total de 2010.
Al respecto Santiago Jiménez, director general de Sky World Protection, empresa especializada en localización y rastreo de vehículos automotores y socio fundador de la Asociación Nacional de Empresas de Rastreo y Protección Vehicular, A. C. (ANERPV), comentó que el robo de autos sigue incontrolable y en alarmante crecimiento.
De continuar con la tendencia y con el promedio mensual de robos, explicó, la cifra final al cierre de 2011 será la mayor de la historia de México.
Cabe decir que en México solo del 30 al 40 por ciento del parque vehicular es asegurado, por lo que se estima que el robo de vehículos rebasa en mucho las 100,000 unidades anualmente, advierte la empresa especializada que forma parte en México del Grupo Ballistic.
Jiménez Dueñas aseguró que el robo se ha diversificado y ya no tiene distinciones para la delincuencia, “lo mismo se roban autos particulares de lujo, como autos sencillos, camionetas de reparto, transportes de mercancías, camiones madrinas que transportan en promedio 12 autos, maquinaria pesada, cajas de tráiler o cajas secas e inclusive hasta motocicletas”.
Asimismo se ha extendido también el robo a vehículos que transportan autopartes nuevas que son trasladadas entre las plantas fabriles de México y Estados Unidos, propiciando pérdidas multimillonarias anualmente al sector empresarial del transporte y a la sociedad en general.
Las acciones desplegadas por parte de las autoridades hasta la fecha no han sido suficientes para combatir más eficientemente este delito, por lo que, dijo, resulta urgente que se tomen acciones inmediatas que permitan conjuntar al gobierno con el sector transporte, con empresas especializadas en GPS y con la sociedad en general, para implementar estrategias e infraestructuras tecnológicas coordinadas que frenen, combatan y den solución a este delito.